El Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador ha tomado una decisión respecto al caso de Stephanie Marjorie Amaya Rosales, conocida como “La Cox”, junto con otros dos hombres, resolviendo absolverlos de dos delitos y enviarlos a juicio por actos preparatorios y proposición y conspiración en el delito de tráfico de drogas.
La resolución de este viernes ha dejado un resultado mixto para los acusados. Mientras que uno de los procesados fue absuelto de todos los cargos y puesto en libertad, Stephanie Marjorie Amaya Rosales y dos hombres más deberán enfrentar un juicio por su presunta participación en actividades relacionadas con el tráfico de drogas.
El juzgado 2° de Instrucción de San Salvador dará a conocer hoy la resolución de la audiencia preliminar que se realizó en contra de 4 imputados entre ellos Stephanie Marjorie Amaya, conocida como Cox. Son acusados de propinar una paliza a un joven hecho ocurrido en la Zona Rosa.… pic.twitter.com/ie0nrdRMrv
— Radio YSKL 📻 💻 📲 (@radioyskl) April 19, 2024
Durante la audiencia, la defensa de los procesados destacó que la mayoría de la resolución fue favorable para sus clientes. Sin embargo, ahora tres de los procesados, incluida “La Cox”, enfrentarán un juicio por actos preparatorios y proposición y conspiración en el delito de tráfico de drogas.
Según la Fiscalía, los acusados formaban parte de una estructura dedicada a distribuir marihuana y cocaína en la Zona Rosa de San Salvador.
El abogado defensor, Gustavo Huezo, expresó su confianza en que durante el juicio se valore adecuadamente la falta de pruebas contundentes, como las conversaciones en WhatsApp que, según él, están fuera de contexto.
La acusación también sostiene que Stephanie Marjorie Amaya Rosales actuaba como intermediaria en la venta de drogas, basándose en comunicaciones donde se solicita droga para abastecerse. La Fiscalía les imputa el delito de agrupaciones, argumentando que se trata de una estructura organizada con temporalidad, cuya existencia data desde octubre de 2022, según evidencia telefónica.
El caso inició tras una golpiza registrada en video el 29 de octubre de 2022 en las afueras de una discoteca en la Zona Rosa, donde los cuatro procesados agredieron a un joven. Aunque la víctima retiró las denuncias por lesiones, este hecho dio inicio a una investigación que desembocó en los cargos actuales contra los acusados.