Mike Johnson, miembro del Partido Republicano, ha sido elegido como nuevo presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU. tras obtener este miércoles los 215 votos necesarios, informan medios locales.
“Es el honor de mi vida haber sido elegido [como el] 56.° presidente de la Cámara”, dijo Johnson en un comunicado compartido en su cuenta oficial de X (anteriormente Twitter). “Gracias a mis colegas, amigos, personal y familia por el inigualable apoyo durante todo este proceso”, añadió.
Asimismo, señaló que han sido unas semanas “arduas”, detallando que la falta de presidente en la Cámara Baja del Congreso es un recordatorio de que “es tan complicada y diversa” como la gente a la que representan.
“La urgencia de este momento exige una acción audaz y decisiva para restablecer la confianza, avanzar en nuestras prioridades legislativas y demostrar [un] buen gobierno. Nuestra Conferencia Republicana está unida y deseosa de trabajar”, continuó.
En este sentido, prometió que se asegurará de que la Cámara ofrezca resultados e “inspire el cambio para el pueblo estadounidense”, restablezca la confianza en dicho órgano, impulse una agenda política conservadora integral, combata las “políticas perjudiciales” de la Administración Biden y apoye a los aliados de Washington en el extranjero. “Devolveremos la cordura a un Gobierno que la necesita desesperadamente”, concluyó.
Reacción de Trump
De esta forma, se pone punto y final a un período de tres semanas en el que la Cámara Baja del Congreso estadounidense estuvo sin presidente, después de que Kevin McCarthy fuera destituido. De hecho, Johnson ha sido el cuarto candidato nominado para ese cargo por los republicanos desde entonces.
“Creo que será un orador fantástico”, declaró Donald Trump, que fue presidente del país norteamericano entre los años 2017 y 2021. “No he oído ni un comentario negativo sobre él. Le cae bien a todo el mundo”, añadió.
Johnson, de 51 años, es un conservador social y abogado. Fue elegido congresista por el estado de Luisiana en 2016 y actualmente ejerce como vicepresidente del Partido Republicano. Cercano a Trump, lideró los esfuerzos jurídicos por anular el resultado de las elecciones generales de 2020.