Un inesperado incidente ocurrió en el Aeropuerto Internacional de West Palm Beach en la madrugada del domingo cuando el Boeing 757 privado del ex presidente Donald Trump chocó con otro avión corporativo desocupado. Afortunadamente, no hubo heridos reportados en este ligero choque aéreo. El suceso tuvo lugar en una zona del aeropuerto no supervisada por las autoridades de tráfico aéreo.
Según informes, el avión de Trump, identificado como N757AF, llegó a West Palm Beach después de un mitin en Nueva Jersey. Aunque no se confirmó si el ex presidente estaba a bordo en ese momento, su aeronave impactó levemente la parte trasera de un VistaJet estacionado.
La aeronave de Trump, conocida como “Trump Force One”, es famosa por su lujosa decoración y comodidades, que incluyen dos dormitorios privados, tres baños y áreas de conferencia, entre otros. El Boeing 757 fue adquirido en 2010 por $100 millones y ha sido un símbolo distintivo durante sus campañas presidenciales.
El incidente ha suscitado preocupaciones sobre la seguridad en zonas no supervisadas de los aeropuertos y ha llevado a una reflexión sobre las prácticas de maniobra en tierra de aviones privados, especialmente durante actividades de campaña.
Mientras tanto, en un contexto político candente, Trump se encuentra en medio de un juicio en Nueva York por cargos relacionados con pagos para silenciar a Stormy Daniels, una actriz de cine para adultos. Aunque el equipo de campaña de Trump no ha emitido comentarios sobre el incidente, su abogado está trabajando para socavar la credibilidad de los testigos en el caso.
Este incidente resalta la necesidad de una mayor vigilancia y precaución en los aeropuertos, especialmente cuando se trata de operaciones de aeronaves privadas de alto perfil.