En serios problemas legales se encuentra el nicaragüense Gustavo Adolfo Guerrero Bermúdez, de 36 años, tras ser detenido por la policía en Nicaragua, después de haber abusado y raptado a una niña de 13 años, originaria de El Salvador el pasado 29 de abril.
El hombre nicaragüense conoció a la niña mientras ella trabajaba cortado cañas con su mamá en una finca en El Salvador. Se ganó su confianza dándole dinero.
De acuerdo a la acusación de la Fiscalía, la adolescente trabajaba con su madre y tía desde los 10 años en el corte de caña en El Salvador. En octubre de 2020, Guerrero Bermúdez empezó a acosarla. En ese entonces le regaló 30 dólares para ganarse su confianza hasta que logró violarla en más de una ocasión.
El abogado penalista, Harry Valle, explica que el sujeto podría ser acusado por tres delitos cuya pena podría sobrepasar los 20 años de prisión. La víctima habría sido raptada por el procesado la noche del pasado 29 de abril de su casa de habitación, ubicada en el municipio de San Luis La Herradura, en El Salvador y posteriormente traída hasta el municipio de El Viejo, del departamento de Chinandega.
Según el libelo acusatorio, durante su permanencia en el país la adolescente fue ultrajada dos veces. La judicial dictó prisión preventiva para el imputado y programó para el próximo 16 de mayo la audiencia inicial.