Por instrucción del Presidente Nayib Bukele, 7,000 soldados y 1,000 policías han establecido un cerco de seguridad en el departamento de Cabañas, para extraer hasta el último pandillero que opere en esa zona.
La labor de estos elementos de seguridad será evitar, a toda costa, la salida de pandilleros del departamento y cortar, una a una, las líneas de suministro de los grupos terroristas.
El Jefe de Estado explicó que Cabañas se ha convertido en el lugar con mayor número de “células terroristas”, que han llegado ahí buscando sus áreas rurales para ocultarse de la justicia.
“Este masivo cerco garantiza aún más la seguridad de la zona y no lo levantaremos hasta dar con todos los delincuentes”, advirtió el Presidente Nayib Bukele.